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LA HOMOSEXUALIDAD EN EL

CINE 

 

 

 

 

 

 

 

La mentalidad de la sociedad actual ha experimentado en un corto espacio de tiempo un cambio tan radical en cuestión de sexo, que me resulta difícil narrar en profundidad de campo lo que reinó entre los años 1940 hasta prácticamente 1970, dentro del mundo del cine, pero no ya solo en Hollywood, sino a nivel mundial. El morbo siempre ha sido el plato preferido de muchos aficionados al cine y se han buscado archivos, noticias o comentarios relacionados con ello, para saciar ese hambre de sexo que sienten los cinéfilos del mundo, olvidando injustamente la categoría de donde proceden tales datos. Si leemos las biografías y publicaciones actuales de actores o actrices tristemente fallecidos en los últimos años, encontraremos en bandeja de plata, manuscritos de autores prácticamente desconocidos, en donde se detallan las intimidades mas insólitas, las preferencias mas impensables, dentro de unas trayectorias artísticas desfiguradas ante tanto dato, supuestamente cierto, que hacen tambalear el suelo que pisamos. No voy a enjuiciar, ni los escritos, ni a los autores a que me refiero anteriormente, y mucho menos los personajes que lo originaron, mi intención es detallar minuciosamente una tendencia sexual, una preferencia ante el gozo y el placer de la carne, o si lo prefieren, una forma diferente de amar. Y eso sí, lo plantearé en carne viva, porque es un hecho actual, totalmente aceptado por muchas sociedades civilizadas y un tema que por su importancia aún suele escribirse con sangre, como si procedieran de vidas errantes, o de seres abandonados de la mano de Dios, cuando las estadísticas han demostrado que la homosexualidad la viven mas del 70 por ciento de los hombres y mas del 40 por ciento de las mujeres del planeta. Nunca pondré en tela de juicio los sentimientos de los seres humanos, sea cual sea su inclinación sexual, porque nadie tiene el derecho a hacerlo, al igual que nunca se le pudo poner color al amor.

 

 Sé que tarde o temprano mi vida cambiará,  tal vez mis hijos no estarán conmigo.... Sé que siempre amaré el cine, cuando es una labor artesanal..... Como también sé que nunca se rodará otro film como " GONE WITH THE WIND"..... Nunca habrá otra Marilyn ..y Brando no volverá a contarme sus vivencias bajo el cielo de Paris.... Como adivino a mi pesar que no surgirá otra actriz como Vivien Leigh....Y sé también, que recordaré mi conmoción cuando escuché la voz de Larry Olivier sobre un Teatro del WestEnd, en Londres, cuando le ví la primavera de 1980. Pero lo que si seguiré siendo es Peter Pan, el eterno niño que con su imaginación vuela y hace que desaparezcan junto a él, entre nubes, en ocasiones los seres que ama, porque de esa forma todos disfrutaremos en un país llamado: "nunca jamás" ....

 Pero antes de que eso llegue, dejadme deciros que, sé que siempre seré el hombre que va escalando cumbres, siempre vivas mis ansias de conquista, y latiendo en mi un corazón que mueve el viento hacia el Este y otras hacia el Oeste......Por esto, no soy la persona apropiada para enjuiciar sentimientos y amistades que nacen y mueren sobre la raza humana..... Como de lo único que sé escribir es sobre cine, me propongo analizar coherentemente el comportamiento y las vidas de estos actores tejidos con hilo de oro y humo de sueños, como algunas de sus películas. Ellas son esos lienzos de Arte, y rozan temas delicados en su planteamiento, siendo fundamentales para todos los hombres y mujeres que siguen escalando cumbres, o para los que todavía permanecen en la oscuridad brutal de sus armarios personales.

Hay actores y actrices que ya no están con nosotros y por respeto, voy a obviar muchos nombres y las confidencias que se me han hecho con relación a las aventuras que tuvieron con personas del mismo sexo, algunos figuran como iconos de la interpretación y se les considera una institución en muchos sentidos. Nadie puede decir viéndolos en pantalla que en su vida privada sus inclinaciones eran totalmente opuestas a los personajes que interpretaron, ni mirando con lupa se podría averiguar, pero la lista sería interminable y algunos rostros causarían estupor en los cinéfilos del mundo, dejando que la incredulidad y la sombra de la duda apareciese rápidamente, pero es totalmente cierto. Pongamos por caso que nadie se imaginó nunca que el actor Rock Hudson, hombre conquistador, y galán de galanes, que tuvo en sus brazos a las mujeres mas bellas de la pantalla, cuando dejaba su personaje encerrado en los platós, vivía los mas numerosos de los romances con otros compañeros, como por ejemplo: Tab Hunter, Dirk Bogarde, Tom Clark, Jack Coates y Ron Channel, escritores y algunas personalidades de la política. Estalló su condición cuando se le diagnosticó en Paris la enfermedad del Sida, y lo que la misma significaba, entonces el mundo entero se estremeció, y fué el origen de que salieran a la luz, no solo sus aventuras múltiples, sino que eran ciertos los comentarios a puerta cerrada que danzaban por toda la meca del cine. Marc Christian, su joven último amante, escribió un libro y siempre temió haber sido contaminado por la cruel enfermedad.

Pero no puedo dejar de comentar algunos casos trascendentales, y lo hago mas por la categoría de los actores, que por el morbo que pueda encerrar el mismo. Al margen de su preferencia sexual existe algo mucho mas importante, algo que está por encima del bien y del mal, y es la brillante carrera que ejercieron para deleite de todos los que vemos en el cine ese arte total y esa válvula de escape que condiciona nuestra vida en muchos casos. En este punto os ruego me disculpéis.

Cary Grant nunca ocultó su bisexualidad, si es que era esa su tendencia, que yo lo dudo. Creo que Cary siempre fué un gay entre la penumbra y la luz, consiguiéndolo a fuerza de evadir el tema, de dedicarse de pleno a su brillante carrera y ofrecernos la imagen de hombre elegante, caballeroso y de modales exquisitos. Cary fué el amante de Randolph Scott durante años, como lo fué de George Cukor en ocasiones y uno de los mejores amigos de Howard Hughes, con el que se dice compartía no solo mesa y lectura, sino otras afinidades, aunque esto ultimo no esta del todo comprobado. Hughes era de la opinión de que podría comprar hombres y mujeres porque todo tenia un precio. También se le relacionó con escritores importantes como Truman Capote, Noel Coward, a los que invitaba en su primera residencia de la playa de Malibú, organizando prolongadas fiestas. Cuando se le preguntaba por estos acontecimientos de su vida privada, el actor siempre contestaba lo mismo;

"A mi también me gustaría ser Cary Grant. He pasado la mayor parte de mi vida fluctuando entre Archie Leach y Cary Grant; sin estar seguro de ninguno, desconfiando de ambos. Fingí ser alguien que deseaba ser, hasta que finalmente me convertí en esa persona, o él se convirtió en mi."

La homosexualidad de Grant está contrastada fielmente y por eso no ha dejado de ser uno de los actores mas brillantes e importantes de Hollywood, un hombre al que todos imitaban y las mujeres amaban. Pero sus preferencias eran otras muy distintas a pesar de sus matrimonios, Grant era un amante de la belleza, de la perfección absoluta y los años que compartió su vida con el actor Randolph Scott, mucho antes de consagrarse definitivamente como el favorito del publico, se dijo que fué la época mas feliz del eterno caballero del esmoking impecable. Los actores y actrices que trabajaron con él, como los directores y productores sabían perfectamente las inclinaciones del elegante Cary, y nunca por ello dejó de ser admirado, amado y respetado hasta limites insospechados. Llegando a mantener una relación de gran amistad hasta con la misma Gracia Patricia de Mónaco, en cuyo Palacio, el actor entraba y salía como si fuera su casa, es mas, había veces en que ni siquiera tenia que ser anunciado. Grace Kelly siempre le dijo que Mónaco era su lugar, su casa y ella su mejor amiga. El escritor Marc Elliot, en su biografía "Cary Grant", cuya lectura recomiendo muy sinceramente, accedemos a la vida del actor de una manera natural, sin prejuicios, ni ataduras, mostrándonos al Cary que realmente era, al tiempo que el brillo cegador del actor no cesa de embriagarnos en cada una de sus paginas. Cary Grant fué una institución en el cine y su condición de homosexual no resto categoría a su labor de actor.

La influencia del cine sobre la propia vida es enorme, su grandeza y capacidad no tiene limites y en ocasiones se torna vital, De él hemos aprendido que el mundo posee historia, magia, fantasía, recursos que muchas veces nos ha servido para afrontar penumbras y la vuelta a un cielo de color, motivos por los cuales nos hizo y nos siguen haciendo volar en nuestros mismos sueños. Dentro de él hemos comprendido una técnica, que con ayuda de la imaginación nos ha hecho conocer a grandes profesionales, seres que llenaban la pantalla, fortaleciendo la mente, los sentidos y el gozo, en una baile orgásmico que no parecía tener fin, cuando en nuestra pubertad era incipiente y en algunos casos concretos hemos sentido el olor y sudor de la mano que nos adentraba en los confines de sus mundos, haciéndolos nuestros. El séptimo arte no es una simple palabra con cierto carisma o gran repercusión, es el arte mas completo que existe, porque adentrándonos en él, encontraremos pinceladas de Cezanne, adagios inolvidables y las mas grandes historias jamás contadas.

Por mis ojos han pasado una inmensa mayoría de películas que la censura nos impedía disfrutar en su totalidad, con nitidez de águila y que al ser decapitada por una esperada democracia, nos las devolvieron en total integridad. De entre sus títulos podría destacar centenares, muchos carecían de un sentido concreto para ser censurados, o tal vez eran victima de mentes enfermizas en su comprensión y planteamiento. Yo, como muchos españoles tuve que sufrir esa injusticia en mis carnes, cuando nos cerraban los ojos al arte. El cine siempre ha sido mi sentido, mi forma de ver, de amar la vida y el mundo, ¿ por qué nó decirlo?... y hasta para practicar sexo. Todavía siento en mi frente el sudor frío en la oscuridad de aquellas salas de programa doble de finales de los sesenta, temblando por temor a ser descubierto, cuando buscaba desesperado el orgasmo perdido….Todavía siento en mis manos el aroma, mezclándose con las historias que me contaban unos hombres y mujeres a los que no puedo olvidar, a los que venero de forma enfermiza, porque siempre conservarán el mismo semblante, el aspecto atrayente y saludable que yo veía en la pantalla de los cines, aunque caminasen entre el polvo del desierto, o la arena de cualquier playa perdida en el infinito. Ellos eran mis portadores de ilusiones y yo me alimentaba de aquel poder de seducción, jugando con sus cuerpos en un vaivén de gozo indescriptible. Los actores nunca dejarán de respirar, sonreír, hablar o embrujar, nunca sus historias serán polvo, ni sus secuencias archivadas en el olvido, porque pasean siempre por nuestra mente, nos hacen recordar frases, sus imágenes y magia quedó para siempre plasmada en películas que viven en nosotros. Somos los únicos que poseemos la llave de los sueños y la cerradura de nuestro desván, está siempre dispuesta a ser penetrada, para volar tras el recuerdo vivo de unas pantallas blanquecinas, que atesoraron el encanto de un arte nunca perdido.

En aquellos años la censura uno de los temas que machacaba era la supuesta, insinuante o clara homosexualidad que manaba de sus textos, haciéndonos comprenderlo desde otro prisma mas incoherente y conservador, como eran los tiempos que corrían. Nunca he comprendido la fobia mundial que generaba ser homosexual, o gay como se denomina ahora, nunca lo he comprendido, porque será siempre una condición mas del ser humano, una variante del sentimiento, una forma de amar, sin detenernos a pesar si es correcto o nó, simplemente esta ahí y forma parte de la rueda que hace girar el engranaje de los sentidos. El cine nos ha abierto amplios ventanales donde se contaban historias de hombres y mujeres que amaron a personas de su mismo sexo, que sufrieron injusticias y persecución por una hipócrita sociedad que en si misma escondía muchas veces deseos de igual tendencia, desarrollando cientos de historias en las pantallas de todos los cines del mundo, pero advirtiéndonos que aquel film poseía alto peligro. Yo todo esto lo he vivido y aún me estremezco de ira, asco e impotencia. Afortunadamente es historia pasada, aunque no por ello, he dejado de sentir la misma sensación.

Lo que el cine de entonces siempre hizo, fué pasar sutilmente por el tema, hacer un rasguño y entregarnos un lienzo salpicado con algunos motivos homosexuales. Afortunadamente la sociedad de entonces, no se parece en nada a la actual y en eso hemos salido ganando todos los que apoyamos la libertad en todos sus puntos. Pero desgraciadamente y en ese sentido han quedado obras que por si mismas son fieles a mi comentario; como Rebeca, Becket, Ben-Hur, La gata negra, La Gata sobre el tejado de zinc y muchísimas mas, pero creo que estos cinco ejemplos son una muestra de lo que el cine era y en lo que se quedaba, después de un profundo lavado sobre textos e imágenes. Afortunadamente hoy, en pleno siglo XXI, con solo mencionar el film Brokeback Mountain, tenemos la diferencia que existe entre una monarquía tristemente coronada y una republica abierta a todos.

 Brando dijo:

"El sexo no tiene sexo"

Y con esta frase el actor, demostró con mas valentía que ninguno de sus compañeros, el sentimiento del hombre, tirando por tierra los comentarios, biografías, memorias no autorizadas, artículos de prensa y leyendas mas o menos ciertas de la condición sexual de muchos de los grandes del Séptimo Arte. La frase encierra su verdad y la opinión que sobre el sexo Brando tenía, lo podéis seguir en mi website, entrando en este vinculo: http://cineclasico.webcindario.com, buscando las partes que componen mi homenaje a un hombre con el que mantuve una amistad de mas de treinta años. Os lo recomiendo, si queréis conocer de verdad del actor de actores. La influencia que Marlon Brando ejerció sobre la interpretación, sobre una forma de vivir y sobre una generación en particular fué muy grande, y yo consumí ese conocimiento con total avidez, como en cierto sentido he asimilado mi admiración hacia otros nombres tan importante como: Marilyn Monroe, Greta Garbo, Vivien Leigh y Laurence Olivier, aunque en otra dimensión, no por ello menos estimulante.

 

Durante finales de los años cincuenta comenzaron a insinuarse relaciones entre personas del mismo sexo en algunas películas, y fue entonces cuando la censura tuvo otro lienzo a triturar, comenzando su tarea de dura y notoria. Films como Ben-Hur, pudieron sortearla gracias al tratamiento casi subliminal de la relación gay que sugiere la película y que en algunas escenas concretas salpica la pantalla. Según el guionista del film, el escritor Gore Vidal en un documental que se realizó titulado: " El celuloide oculto ", dijo que Ben-Hur era una historia que giraba alrededor de una relación homosexual que mantuvieron los dos personajes masculinos principales durante su adolescencia y que en el film es tratada como una simple y llana amistad. No ocurrió lo mismo con la obra de Kubrick "Espartaco", película en la que la censura eliminó la escena en la que se podía ver al esclavo Tony Curtis bañar a su amo Olivier, mientras ambos hablan veladamente de homosexualidad, afortunadamente el film ha sido totalmente restaurado y doblado de nuevo, quedando en la cuneta de los pasos falsos la referida secuencia. Existen centenares de Films, sería una labor interminable comentar cada uno de ellos, pero me centraré en los que figuran como iconos famosos de los estragos de la censura. No me va a ser fácil, porque hay ejemplos como el de " La gata sobre el tejado de zinc" y " De repente el último verano", ambas basadas en rotundos éxitos teatrales y escritas por ese maestro que fué Tennessee Williams y que fueron cruelmente masacradas por las tendencias de algunos de sus protagonistas, dejando que no se mostrasen con total claridad las inclinaciones amatorias de muchos de ellos.

 

 

Durante casi treinta años, la censura estuvo autorizada a cambiar diálogos, escenas, personajes o tramas que no concordaran con los principios del código establecido y así en "Días sin huella", las dudas que su protagonista tiene acerca de su sexualidad y que están presentes en la novela en la que se basa el guión, se silencian totalmente en el film. En "Encrucijada de odios", grandiosa película, que está basada en un libro que trata sobre unos asesinatos de gays, se convirtió de la noche a la mañana en una película sobre el asesinato de unos judíos. La nueva censura prohibió cualquier referencia explícita al tema, pero no pudo eliminar todo. Aunque la mayor diferencia con el periodo anterior estaba en que los homosexuales dejaron de ser elemento cómico para asumir el papel de villanos, más acorde con el concepto que el Código Hays quería transmitir a toda la sociedad y que ésta aceptaba a regañadientes. De esta forma películas como, REBECA o SIN REMISIÓN, mostraban a lesbianas capaces de perseguir sus objetivos sin ningún escrúpulo, mientras que en "Young Man with a Horn", la actriz Lauren Bacall interpretaba a una mujer bisexual que vive una vida autodestructiva y desordenada. También en "LA SOGA" de Hitchcock, dos jóvenes unidos por una sugerente relación asesinan a un compañero de estudios. Al no poder hacerse alusión directa a la homosexualidad, ésta debía insinuarse por medio de guiños para que el público pudiera identificarlos fácilmente. Así, en "EL HALCÓN MALTES", uno de los mejores Films de tema policíaco que he visto, el personaje interpretado por Peter Lorre, que en la novela es gay, es presentado a Bogart, resaltando que se perfuma mucho, mientras suena una música dulce de fondo. También en el western se contó con películas donde se insinuaba la homosexualidad, como en las escenas entre Monty Clift y John Ireland, en la película de Howard Hawks: "Río rojo", o el lesbianismo de las protagonistas de "Juanita Calamidad" y "Johnny Guitar".....Afortunadamente estas barbaridades hoy en día suenan increíbles y te hacen sonreír irónicamente, pero son ciertas y si en algo pueden tambalearse los cimientos del Séptimo Arte a lo largo de su historia, es el haber permitido semejante atrocidad.

Resulta paradójico que en pleno siglo XXI, cuando la legalización entre personas del mismo sexo son un hecho en algunos países modernos y se le dá el lugar que le corresponde, al lado de otras opciones igualmente validas, se recuerden las historias trágicas que tuvieron que vivir muchas mujeres y hombres del cine, como por ejemplo: Que unos Estudios inventaran para Rock Hudson amantes femeninas que nunca existieron o para James Dean idilios con Natalie Wood o Pier Angeli, cuando de todos era sabido que el actor era un gay totalmente convencido, o que el mismo Cary Grant deseaba mas como compañía en la cama a los hombres, que a las mujeres. Sin olvidarnos a mi Marlene Dietrich, intentando seducir en la pantalla a Jefes de Estado, escritores o héroes de leyenda, cuando en realidad amaba en toda su intensidad a las mujeres. Tal vez pienso a veces, que era otra sociedad, tal vez la política empleada por los estudios de cine era mas propia de un cuento de hadas, que reflejo de la vida misma..... Creo sinceramente, que la historia ha sido cruel en este punto y el cine un campo muy apropiado donde plantar la semilla de la hipocresía mas absoluta.

 

 

Luchino Visconti dijo:

" El amor es el sentimiento mas transparente que existe, tan bello y delicado como el cristal de Bohemia ".

 

Dirk Bogarde:

 " Amar a un hombre es como saborear un vino de buena crianza ".

 

Y siempre recordaré a Marlene, cuando se pronunció con esta frase:

"El amor es el motor de la mente, el cerebro mueve sus hilos y la amistad posee la libertad para escoger quien compartirá estos sentimientos".

 

Emulando un párrafo del clásico de Alfred Hitchcock:

 "REBECA":

"Los caminos serpenteados me conducirán hacia Manderley"

...o lo que es lo mismo:

 "Los senderos de la vida te llevarán a atrapar la eterna felicidad".

Y es así como los actores van componiendo una estampa propia de los prototipos que les toca interpretar en pantalla, hasta adentrarse en su mas íntimo Manderley. Algunos han utilizado sus encantos para poder divisarlo como si todo fuera natural, otros se han dejando manipular por los Estudios y hasta en nuestros días, nombres como Tom Cruise, Kevin Spacey, Kevin Kline o John Hurt, se han visto mezclados en historias de homosexualidad. Creo que lo mas importante de esta profesión es el trabajo en sí, y algunas actrices de ahora, sucumben ante el morbo mas explicito, sobre todo si su nombre brilla sobre alfombras rojas, solo figuras como Greta Garbo y Marlene Dietrich, consiguieron estar por encima del murmullo, las sucias historias o los libros que se han publicado. Creo que el secreto de estar libre de aristas, consiste en poseer el carisma envolvente que pueda darnos la admiración con que el mundo ama sus películas y poseer esa magia que rara vez se desecha, señalándolas como es el caso de Greta&Marlene en iconos gay. Existen casos como los de Kevin Spacey y Kevin Kline o directores como Franco Zeffirelli y Luchino Visconti, que supieron cruzar con categoría de monstruos sagrados esos confines:

"Los caminos serpenteados les han conducido al Olimpo".

Franco Zeffirelli, amigo y amante de Visconti, nunca ocultó ser homosexual y es autor de una obra cinematográfica digna de todo elogio.

 Creo que en algunas ocasiones puede ser beneficioso ser gay en el mundo del cine, la homosexualidad no transforma la profesionalidad de estos nombres, como tampoco los Films que representan, porque ello les hace sobresalir, ser morbosamente mas admirados y posiblemente ensalzados a cumbres que de ser heterosexuales no hubieran conseguido. Por lo tanto beneficiarse o asumir una tendencia, es alimentarse del manjar multicolor que el arco iris traza en el desarrollo de una película, en una trayectoria artística o en la propia vida de estos hombres y mujeres que consiguen con ello, que el cine siga siendo el Séptimo Arte.

De todas las películas que han sido criticadas o elogiadas, se podría elaborar una lista interminable, pero si nos ponemos a investigar nadie aseguraría a ciencia cierta la verdad, puesto que la rivalidad o la envidia han sido pasto de que figuren como iconos gay del cine, darles una barata publicidad y nunca por motivos artísticos. Pero dentro de esa leyenda, en labios de todos están los actores que de alguna forma se han visto envueltos en ella, y todavía están saliendo biografías y documentos sacando a la luz unas tendencias gays a ritmo de trompeta, como si el sentimiento mas viejo del mundo fuera un crimen. Dentro del cine, del teatro, de la pintura y las letras,  hay verdaderos profesionales, auténticos ejemplos para generaciones y cultivo de estudio, sin que por ser homosexuales impida la admiración del mundo. Sería injusto por mi parte obviar los actores que siguen a continuación, cuando estoy escribiendo sobre la homosexualidad en el cine, pero todo aficionado al cine los habrá visto alguna vez mezclados con el tema, una vez porque ellos mismos lo confesaron y otras porque al cabo del tiempo, la verdad sale bruscamente del armario:

 

El cine de hoy no da a la homosexualidad la enorme importancia con que se la dibujaba hace 30 o 40 años, es mas, los guiones como "PHILADELPHIA", son magníficos alegatos a favor  y en defensa de los seres victimas del SIDA, que lo viven abiertamente para nosotros en pantalla. Se puede conseguir realizar un gran film, con enormes cantidades de carne dispuesta a ser abierta en canal, y hurgar dentro, sacando a la luz escondidos sentimientos, sin que se tenga que modificar un texto, un dialogo o un simple encuadre. ¿Se puede hoy hacer retroceder el tiempo y rodar un film como LA GATA SOBRE EL TEJADO DE ZINC, respetando la idea original de Williams?, seria fantastico, asombroso, pero reconozco al mismo tiempo que desaparecería ese encanto de la sugerencia por la realidad, y el film de Brooks perdería toda la ambigüedad que tiene.

 

¿Imaginan el final de LA CONDESA DESCALZA de Joseph. L. Mankiewicz, de no haber cambiado el problema del conde que no era otro que ser gay?, pues ahí está el encanto del desencanto, o la muestra de como una película, magníficamente interpretada, con una factura envidiable, deja de ser una obra comprometida para convertirse en una simple buena película.

A propósito de LA CONDESA DESCALZA, Mankiewicz dijo:

" Escribí un magnifico guión y unos actores de categoría, pero al cabo de los años veo con tristeza que mi querida María no estaba descalza, su problema era que llevaba un solo zapato y éste era de tacón alto".

 

Una vez leí un articulo de Pérez Reverte sobre un viaje que hizo a Venecia, y su contemplación de una pareja del mismo sexo amándose tiernamente en los canales, como si por un momento el film de Visconti traspasase la ficción a la realidad y el buscador de belleza hubiera encontrado la misma en ese rostro que mira con amor, con delicadeza, rozando con sus dedos aquella dura barba....Fué un relato realmente espléndido, y lleno de ternura.

Hay ciento de ellos en el cine, pero no voy a jugar a insertar en mi articulo nombres por el simple hecho de dar color, ellos están en la mente de todos, y nadie puede arrojar la piedra. Recuerdo las palabras de mi amigo Brando, cuando me dijo:

"Para mi existe una sola condición humana, pero existen muchas formas de amar y tan validas como el sol que curte nuestra piel, por eso siempre he dicho que "el sexo no tiene sexo".

Hay una clara diferencia entre los actores y el tema en sí. Existe el actor como Brando que no le importó lo mas mínimo encarnar a un militar gay y ser el esposo sufrido de Elizabeth Taylor en "Reflejos en un ojo dorado" y está Monty Clift (ambos alumnos del Actors), que rechazó hacer la película, a pesar de volver a trabajar con su mejor amiga en el referido film, y ofrecer al mundo la imagen que siempre procuró ocultar con todas sus fuerzas. Cosas como estas abundan en la cinematografía y fué mas acentuado, como dije anteriormente, en los años 60 y 70, donde se traspasaban papeles de un actor a otro por motivos morales o políticos....Pero es aquí donde se vé al autentico profesional, al actor desafiante, que se come los prejuicios sociales y encarna con profesionalidad sus personajes, aunque en estos abunde una clara ambigüedad.

Muchas otras peliculas, consideradas dentro de género gay, serían aquellas en los que aparecen elementos homosexuales como trama del film. En estos largometrajes, la homosexualidad funciona como complemento y desarrolla brillantemente un guión, como sucede en: LA CALUMNIA o PHILADELPHIA.

 También está patente en los que narran formas de vida, como por ejemplo "LA CAÍDA DE LOS DIOSES", de Visconti, donde Helmut Berger aparece travestido como Marlene Dietrich en El ángel azul. Este mismo actor,  en otro film de Visconti da vida al monarca Luis II de Baviera, llamado "el rey loco". En ese marco de la Alemania nazi, está "CABARET", que muestra la pasión sin dobleces entre el noble Maximilian von Heune por Brian Roberts. "VICTIM", en la década de los sesenta, que comienza a tocar con mayor permisividad el tema de la homosexualidad, en este film Basil Dearden dirigió a Dirk Bogarde, que da vida a un hombre que, a pesar de amar a su esposa, sentía una pasión incontrolable por un joven. Tema que se repite en "TEMPESTAD SOBRE WASHINGTON" de Preminger, o el film que no me canso de mencionar muchas veces y que me parece un ejemplo de cuanto digo: "REFLEJOS EN UN OJO DORADO", con Elizabeth Taylor y Marlon Brando. Esta película fué condenada por la "National Católica Office for Motion Pictures", aparte de las críticas que Brando recibió por su interpretación, algo injusto, ya que el actor demuestra como nunca sus registros interpretativos, abriendo de par en par una gama completa de como puede un hombre vivir una pasión subterránea, a todas vista razonable, si tenemos a nuestro lado como pareja a una Liz Taylor, encarnando esta vez un tipo de mujer abiertamente vulgar e insoportable.

Sin lugar a dudas, el más emblemático de los Films gay, es sin duda QUERELLE , último film de uno de los cineastas alemanes más provocadores de la década de los sesenta. Compañero junto a Herzog y Wenders de lo que se denominó la joven generación alemana.  Fassbinder realizó esta película, basándose en una obra de Jean Genet. Faasbinder posee una compleja filmografía en la que siempre aparece como elemento esencial el sexo. QUERELLE, es el espejo de su personalidad. Por un lado, marca el culto a sí mismo, expresado en caracteres masculinos y femeninos, por otro lado, el espejo demarca la distanciada exposición de esa condición: entre él y la realidad representada como cualidad intrínseca pero visible del objeto. En el film, el mundo gay trasciende resquebrajado y multiplicado. Refleja también, una atmósfera que camina entre lo sórdido y los deseos más recónditos, allá donde se une el placer puro por el placer de poseer. Recuerdo que cuando contemplé esta película, yo era un adolescente curioso, y toda aquella aglomeración de sexo por el sexo se centró en mi, haciéndome dudar hasta de mi propio nombre. Hoy en día, en la madurez, comprendo mejor las secuencias, admiro la maestría de su director y recomiendo verla con tranquilidad, con esa paz que da el estar contemplando el sentimiento humano en vivo, envuelto en un rojo asfixiante, pero bello.

El más emblemático de los Films gay, es sin duda:

 QUERELLE

 

Siempre que veo una película exijo que, reúna los ingredientes básicos para tenerme fuertemente atado a la butaca: director, actores, argumento. etc. pero salvo contadas ocasiones, existe mucha basura, tanta que apesta.....El publico de hoy en día, creo que solo va al cine por llenar un hueco, por ocupar unas horas, por ver un desnudo de esta o aquella actriz, o los glúteos de un determinado actor ....Y es lamentable, porque el cine es mucho mas que un simple envoltorio o unas imágenes para alimentar la mente, el cine puede enseñarnos a amar, a comprender sentimientos, a saborear el trabajo de unos actores, a sentir como traspasan la pantalla y hacernos soñar como cuando éramos adolescentes y sentíamos erecto lo prohibido en la oscuridad de los cines de los años sesenta, soñando con iconos de nombres imborrables. El cine, no me cabe la menor duda, es el arte que mejor refleja lo que navega por nuestro cuerpo, él nos lo ofrece libre, aunque desgraciadamente en aquellos años de censura nos lo ocultaban de forma antinatural. Afortunadamente todo aquello el viento se lo llevó para siempre.

El cine italiano ha sido siempre mi ojo derecho, he amado el comienzo del neorrealismo, sus directores, actores y actrices, ello ha motivado que me sienta atraído por todo lo que venía procedente de Italia, me he bañado en las imágenes de unas vidas hecha jirones, como las que Fellini dibujaba con pincel de fuego, he sucumbido a los encantos de la mujer italiana recorriendo las empedradas calles de cualquier lugar del viejo Nápoles, me he emocionado con las miserias de Cabiria, e interiormente me sentía participe del grupo que recorría las noches romanas en aquella comedia satírica que era "Boccaccio 70", envidiando a la propia Anita Ekberg en su baño de la Fontana di Trevi o hurgando en mis sentimientos como uno mas de los hermanos en busca de una tierra prometida, en ese canto a la vida que Visconti dibujó para su "Rocco y sus hermanos". No puedo mencionar todos y cada uno de los Films que compusieron el brillante neorrealismo, solo puedo sentir un amor inmenso hacia él y admirar como loco las labores de dirección de unos hombres brillantes, que dieron prestigio a la historia del cine y al italiano en particular. Uno de los más importantes fue sin lugar a dudas Luchino Visconti, cineasta abiertamente bisexual y uno de los fundadores del Neorrealismo que más tarde evolucionaría hacia un cine más personal en el que era frecuente la presencia de personajes ambiguos. Ya en su primer trabajo eran frecuentes sus pinceladas gays,  fue "Obsesión", en la que la presenta la amistad entre dos personajes, como una relación amorosa. Otros títulos del maestro con elementos parecidos fueron "Rocco y sus hermanos",  o la más explícita de todas y uno de los Films que mas impresión me causó en aquella época, "La caída de los dioses", en la que hace una perfecta reconstrucción de la noche de los cuchillos largos, mezclando la historia de una saga familiar, con claros toques freudianos. Pero su película más emblemática, por la que se vertieron comentarios de todos los colores, ensalzando una obra que ha pasado a la historia como pieza de culto absoluto, fue "Muerte en Venecia",  adaptación de la novela de Thomas Mann, en la que un compositor de música clásica, tal vez inspirado en el propio Gustav Mahler e interpretado por un Dirk Bogarde en su mejor etapa artística, haciendo una interpretación difícil de igualar, en donde su obsesión por la búsqueda de la belleza, le lleva a volcar sus sentimientos en la figura simbólica de un joven italiano, encontrándola al final, en una de las secuencias mas bellas que yo haya visto jamás: La figura del jóven, en la orilla de la playa del Lido, señalando el lugar donde irá la búsqueda y que pondrá final  a la vida del viejo músico.

Su obsesión por la búsqueda de la belleza, le lleva a volcar sus sentimientos en la figura simbólica de un joven italiano

Si Visconti hizo de la homosexualidad una parte importante en su trabajo, otros directores como Franco Zeffirelli o Bernardo Bertolucci hicieron mención a ella, pero de forma mas sutil. De toda la filmografía de Bertolucci, su película más abiertamente homosexual fue "El conformista", en la que durante la dictadura de Mussolini, un hombre reniega de sus inclinaciones casándose con una mujer, afiliándose al partido fascista y de esa forma intentar parecer heterosexual. También ambientada en el mismo periodo existen muchos films realizados por profesionales italianos, donde la critica social da paso al neorrealismo, pero de forma menos directa, aunque no menos interesante. A mi particularmente siempre que recuerdo a Sofía Loren, la asocio a dos films emblemáticos y característicos, uno, por supuesto "Matrimonio a la italiana" y el otro el film de Ettore Scola "Una jornada particular", en este último la influencia de los grandes maestros como De Sica, Visconti y Pasolini esta siempre presentes y también hacen referencia a la homosexualidad en la historia que cuenta: Narra la amistad entre Sofía, casada con un miembro del partido fascista fanático y autoritario, y un homosexual interpretado de manera impecable por Marcello Mastroianni, que representa todo lo contrario a su marido. Jamás ví a Sofía tan convincente, ni a un Mastroianni tan autentico, ambos hacen explotar la pantalla y dan una autentica lección de como debe ser una interpretación, aunque estén castigados a ser los supervivientes de una jornada particular.

 

Debo mucho al cine, él siempre me indicó el camino a TARA, siempre me hace volver a mis origines, y como si de Escarlata O´Hara se tratase, busco mis raíces entre la tierra roja, aunque ahora huelan a locales oscuros, a celuloide, y a palomitas de maíz. Ello me hace sentirme mejor, y no por ello oculto mi cabeza tras el ala del avestruz. Sigo explorando los caminos serpenteados de mi Manderley particular, y aunque a veces el llanto y la rabia no me deja seguir, me limpio las lagrimas con las verdes hojas del camino y me alimento, aunque mal, de lo que es el cine ahora. Hay excepciones, en ellas confío, pero siempre miro con nostalgia el pasado, porque sé que como aquellos caminos serpenteados que me descubrió el film REBECA de Alfred Hitchcock, nunca mas volverán.

El cine me da la razón, él siempre es ese amante que nunca miente, sus secuencias síntesis de palabras, reflejo de caricias, resultado de búsquedas....Ya va siendo hora de que el hombre descanse en su lugar, como el guerrero que victima de desamores, vislumbró un buen día como se erigía su reposo en lo alto del crepúsculo de sus dioses.

En cualquier callejón de una Venecia nocturna, mientras la cámara recorre en magistral travelling las figuras anónimas y los rincones palaciegos cercanos al canal, una góndola sigue su navegación majestuosa, mientras las figuras masculinas ejercen su oficio con el pensamiento de que es lo mas parecido al amor. La mano maestra y el ojo sabio de un Visconti en su mejor momento, recrea la ciudad como solo él podía hacerlo para su "Muerte en Venecia", dejando que el celuloide plasme la realidad de un sentimiento, una forma de vivir, un trozo hecho añicos, dando entrada para la eternidad sin él pensarlo, a una secuencia que muy bien se podría decir que refleja el destello en un ojo dorado y así la creó para la inmortalidad".